Una rica taza de té nos acompaña en diferentes momentos del día, entregando energía para empezar la jornada con ánimo, calidez cuando el clima es frío, y calmando la sed cuando las temperaturas aumentan al tomarlo helado.
Pero eso no es todo, la infusión no es solo una rica bebida, sus múltiples beneficios entregan al organismo diferentes propiedades saludables, que pueden ser incorporados a diversas preparaciones en nuestras comidas de cada día.
El té ya no solo debe ser visto como acompañamiento a nuestros alimentos, sino como un ingrediente más al momento de cocinar una deliciosa cena o un dulce postre.
Descubre qué tipo de té es ideal para cada preparación:
- Té Negro: es perfecto para cocinar carnes rojas como el vacuno o cerdo, debido a su sabor más fuerte. Ahora, si se quiere usar en preparaciones frías, se recomienda en helados o chocolates. Otra opción, es el té negro aromatizado con alguna esencia donde se pueden preparar exquisitos queques con sabor a toques de limón o una rica leche asada con canela.
- Té Verde: por su sabor más ligero se puede utilizar en salteado de verduras o en aderezos para ensaladas. Incluso, puede ser utilizado en carnes blancas para adobar un el pollo o pescado.
- Té Blanco: es el más suave de todas las variedades por lo que es perfecto para preparaciones con frutas.
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